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Asenjo Zegers Gonzalo Héctor – Memoria Viva

Asenjo Zegers Gonzalo Héctor

Rut:

Cargos: Jefe de la Unidad Antiterrorista de la CNI

Grado : Teniente Coronel

Rama : Ejército

Organismos : Central Nacional de Informaciones (CNI)

Año Fallecimiento : 2006


Procesan a 12 ex agentes de la siniestra CNI por secuestro

Fuente :Cronica Digital, 22 de Septiembre 2006

Categoría : Prensa

El fallo fue dispuesto por el juez Haroldo Brito contra 12 ex agentes de la Central Nacional de Informaciones (CNI) involucrados en el operativo, entre los que destacan el general (r) Hugo Salas, el mayor (r) Alvaro Corbalán y el teniente Coronel (r) Krantz Bauer.

Según el dictamen, está probado que las cinco víctimas, pertenecientes al Frente Patriótico Manuel Rodríguez, fueron lanzadas al mar desde un helicóptero del Ejército, en represalia por el rapto del coronel Carlos Carreños en septiembre de 1987.

Brito, nuevo magistrado a cargo de la investigación desde el pasado julio, recalificó los encausamientos que en su momento habían dictado el juez Mario Carroza y el hoy integrante de la Corte Suprema Hugo Dolmestch.

Los desaparecidos, considerados las últimas víctimas de la dictadura militar (1973-1990), se nombran Gonzalo Fuenzalida Navarrete, Julio Muñoz Otárola, José Peña Maltés, Alejandro Pinochet Arenas y Manuel Sepúlveda Sánchez.

De acuerdo con el dictamen, Salas (último director del CNI) y sus subalternos Corbalán y Bauer fueron encausados en calidad de coautores del secuestro de Sepúlveda Sánchez, Fuenzalida Navarrete y Muñoz Otárola.

El magistrado, además, procesó como coautores de los secuestros de Peña Maltés, Sepúlveda Sánchez, Fuenzalida Navarrete y Muñoz Otárola a los ex agentes Manuel Angel Morales, César Acuña Luengo y René Valdovinos Morales.

En tanto, los ex miembros de la CNI Víctor Ruiz Godoy, Manuel Ramírez Montoya, Luis Sanhueza Ross, Luis Santibáñez Aguilera fueron encausados como coautores de los secuestros de Alejandro Pinochet Arenas, Sepúlveda Sánchez, Fuenzalida Navarrete, y Muñoz Otárola.

Finalmente, el dictamen también afecta a Gonzalo Asenjo Zegers y Rodrigo Pérez Martínez, quienes enfrentan cargos en calidad de encubridores de los mencionados delitos, y que por primera vez son procesados en esta investigación.

El piloto Aquiles Navarrete confesó que la orden para asesinar y hacer desaparecer a los detenidos provino del propio Augusto Pinochet, que se indignó al enterarse de que la CNI pretendía canjearlos por el coronel Carreño.

Según trascendió en fuentes judiciales, hasta ahora no existe certeza de que él y los copilotos Luis Campos y Héctor Barrientos, al momento de los hechos hayan estado en conocimiento de que los bultos trasladados contenían los restos de los frentistas.

En su resolución, el magistrado subrayó que está probado que los cinco frentistas fueron secuestrados en represalia por el secuestro del coronel Carreño, entonces funcionario de la Fábricas y Maestranzas del Ejército (FAMAE), perpetrado el 1 de septiembre de 1987.

“Funcionarios de la CNI procedieron a secuestrar a cinco miembros del FPMR, para eventualmente canjearlos por dicho oficial, los que fueron elegidos desde los archivos institucionales”, sostiene el dictamen.

Si bien el magistrado reconoce que el secuestro de los cinco frentistas fue gestado a partir de una decisión única, su ejecución contó con la participación de distintas unidades y funcionarios de la dictadura militar, que tuvieron acceso a información compartimentada.


Desaparición de cinco frentistas en 1987 fue obra de la CNI y la DINE

Fuente :La Nacion, 29 de Noviembre 2006

Categoría : Prensa

Una reservada diligencia realizó ayer el ministro Haroldo Brito que sustancia el proceso por la desaparición de cinco frentistas en 1987.

El magistrado citó a tres ex agentes de la CNI al Cuartel Borgoño de la Policía de Investigaciones y posteriormente se dirigió en un auto institucional hasta el penal de Punta Peuco. Se trataba de tres procesados por la muerte los militantes del FPMR, Arturo Sanhueza Ross, Rodrigo Pérez y Krantz Bauer Donoso.

Una vez en el recinto y ante la sorpresa de los ex agentes, Brito llamó al ex jefe operativo de la CNI, Álvaro Corbalán Castilla para carearlos y determinar que sucedió con Manuel Sepúlveda Sánchez, Gonzalo Fuenzalida Navarrete, Julio Muñoz Otárola, Julián Peña Maltés y Alejandro Pinochet Arenas, una vez que fueron detenidos y entregados a este último.

De acuerdo con la versión obtenida por La Nación con una fuente cercana a la investigación, los tres ex militares mantuvieron sus dichos, en torno a que en 1987 detuvieron a los frentistas por una orden emanada de la justicia militar en el marco de la indagatoria que realizaba la CNI, por el secuestro del coronel Carlos Carreño. Hecho esto se los entregaron a Corbalán, perdiéndoles el rastro, debido a la compartimentación que existía en dicho servicio de inteligencia.

Tesis-rumor

La molestia entre los ex agentes cundió cuando Corbalán aseguró carecer de información al respecto. Señaló al ministro Brito que la coordinación para terminar con la vida de los cinco frentistas y su posterior lanzamiento al mar en el helicóptero de Pinochet, la hicieron los entonces jefes máximos de la CNI y la Dirección de Inteligencia del Ejército (DINE), los generales (R) Hugo Salas Wenzel y Hugo Prado, respectivamente.

La diligencia, de acuerdo con la fuente consultada, logró establecer que Corbalán, en efecto sabe más de lo que asegura desconocer, toda vez que imputa a la DINE, la tesis que ha corrido desde los últimos dos años en el caso, en torno a que el secuestro de Carreño se habría tratado de una infiltración en el FPMR.

Los procesados

Actualmente, están procesados por secuestro calificado los ex agentes Víctor Ruiz Montoya, Arturo Sanhueza y Luis Santibáñez. En calidad de coautores Hugo Salas Wenzel y sus dos colaboradores, Álvaro Corbalán y Krantz Bauer. Les siguen por el mismo delito Manuel Morales, César Acuña y René Valdovinos. Como encubridores están los oficiales (R) del Ejército Gonzalo Asenjo (quien se suicidó en octubre) y Rodrigo Pérez. LN


Militar (r) implicado en causas de DD.HH. se quitó la vida

Fuente :El Mercurio 5 de Octubre de 2006

Categoría : Prensa

Gonzalo Asenjo Zegers debía concurrir el próximo martes al Comando de Apoyo Logístico del Ejército con el objeto de ser notificado de un procesamiento.

El comandante (r) del Ejército, Gonzalo Asenjo Zegers, se suicidó esta mañana en su domicilio, ubicado en el sector oriente de Santiago.

El ex uniformado había sido procesado por el ministro en visita Haroldo Brito como presunto autor del secuestro de cinco frentistas en septiembre de 1987.

Estos frentistas aún se encuentran desaparecidos y todo indica que tras ser asesinados fueron lanzados al mar desde un helicóptero.

Asenjo se desempeñó como jefe de la Unidad Antiterrorista de la ex CNI y también como jefe de la División de Análisis del mismo organismo de seguridad.

El próximo martes debía concurrir al Comando de Apoyo Logístico del Ejército con el objeto de ser notificado de la resolución del ministro Brito e iba a quedar en prisión preventiva.

El militar era hermano de Rodrigo Asenjo, ex Fiscal Nacional Económico y ex embajador de Chile en Ecuador.

El hecho está siendo investigado por la División de Homicidios de la Policía Civil.

Segundo suicidio

A principios del 2005 también se suicidó el coronel (r) Germán Barriga, también procesado por causas de Derechos Humanos y que sufrió una "funa" en el lugar en que trabajaba lo que le valió el despido.

Barriga se lanzó desde el piso 18 de un edificio en la comuna de Las Condes, frente a la Escuela Militar y dejó una carta en que acusaba el abandono en que se había dejado a los militares acusados.


Las dudas que rodean la muerte del ex agente de la CNI Gonzalo Asenjo Zegers

Fuente :El Mostrador, 7 de Octubre 2006

Categoría : Prensa

La investigación por el deceso quedó a cargo del fiscal jefe de Las Condes, Rodrigo de La Barra, quien maneja tres hipótesis sobre el hecho: la autoeliminación, un accidente o la intervención de terceros. La víctima de esta trágica muerte fue uno de los procesados que dio luces sobre la posible participación del Ejército en el caso de los cinco desaparecidos de 1987.

Aunque en un primer momento la hipótesis de la autoeliminación, ya sea por decisión propia o accidente, fue la que más cobró fuerza para abordar el deceso del ex agente de la Central Nacional de Informaciones (CNI) Gonzalo Asenjo Zegers, actualmente el fiscal jefe de Las Condes, Rodrigo de La Barra, sumó la posible participación de terceros en el hecho, debido a nuevas presunciones que han surgido respecto a las circunstancias de su muerte.

Hasta el momento, lo único claro respecto al fallecimiento es que éste se produjo por un impacto de bala en la zona toráxica. Sin embargo, debido a la ausencia de testigos y de huellas ajenas a la víctima en el sitio del suceso aún no son aclaradas varias de las interrogantes que rodean la investigación.

Si bien, como se dijo, las primeras informaciones dieron cuenta de un suicidio o un accidente que habría sufrido el ex uniformado al proceder a limpiar su arma de servicio sin percatarse de que el revólver estaba cargado, hay otros antecedentes que jugarían en contra de dichas teorías.

Dudas sobre el suicidio

Primero, según se explicó, Asenjo Zegers no dejó ninguna carta o nota explicando los posibles motivos de su autoeliminación, hecho que es recurrente en las personas que toman ese tipo de determinaciones. Esto se suma a las versiones de personas que se relacionaron con él durante los últimos días, quienes afirmaron a El Mostrador.cl que se encontraba "tranquilo y muy optimista" respecto a su futuro procesal.

El pasado 20 de septiembre, el ex agente represivo, quien operó bajo la chapa de "Juan Carlos Catán Caroca" en la disuelta CNI, fue procesado como encubridor de las desapariciones de cinco miembros del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, quienes fueron detenidos, asesinados y sus cuerpos arrojados al mar luego del secuestro del coronel de Ejército Carlos Carreño, ocurrido el 1 de septiembre de 1987.

En ese sentido, sus cercanos -que lo vieron por última vez el pasado lunes en la noche- relataron que estaba consciente de que su participación en este hecho era bastante secundaria. Además, tenía trabajo y el compromiso de sus empleadores de que no sería exonerado a raíz de este tema, pues arriesgaba una leve condena que incluso podía cumplir en libertad.

"Nos extraña mucho que se haya suicidado, porque él estaba tranquilo y optimista, muy afable. Pese a que estaba preocupado por lo que estaba pasando, jamás habló de la posibilidad de un suicidio", sostuvieron estas fuentes.

Al respecto, acotaron que el único hecho que podría haber desencadenado esa posible decisión era el serio perjuicio que podría generar este tema a su hermano Rodrigo Asenjo Zegers, quien además de haber sido ex Fiscal Nacional Económico, ahora se desempeña como abogado integrante de la Corte de Apelaciones de Santiago y es candidato a ser Contralor de la República, y el hecho de tener un hermano procesado por violaciones a los derechos humanos podría haberle creado un cierto descrédito entre sus pares.

Posible accidente

Respecto a la posibilidad de que esto haya sido un desafortunado accidente ocurrido mientras limpiaba su arma de servicio, el dato que más juega en contra de ello fue entregado por miembros de su propia familia, quienes afirmaron ante el fiscal De La Barra que él no tenía la costumbre de limpiar muy a menudo, por no decir nunca, su armamento.

Además, conocedores del tema niegan tal posibilidad, ya que a un ex oficial de Ejército le sería casi imposible que le ocurriera tal cosa, dado que lo primero que se enseña en el manejo de las armas es cerciorarse que no se encuentre cargada al momento de desarmarla. Y además, que éstas nunca se deben poner en posición de apuntar al propio cuerpo.

No obstante, una conducta que también es típicamente suicida es preparar el escenario de la muerte para que parezca un accidente, por lo cual es una posibilidad que no se puede descartar que el haber dejado útiles para limpiar armamento cercanos a él formara parte de un "escenario" preparado por Asenjo Zegers como una forma de minimizar o mitigar el dolor a sus familiares.

En todo caso, el mencionado fiscal a cargo de la investigación ya ordenó los peritajes de rigor al Laboratorio de Criminalística de la policía de Investigaciones, así como también se encuentra a la espera del preinforme de autopsia que debe elaborar el Servicio Médico Legal (SML). Dichos análisis pueden arrojar muchas luces sobre las reales circunstancias de la muerte.

La participación de Asenjo en los crímenes de 1987

Según las declaraciones que prestó Gonzalo Asenjo ante el ministro Hugo Dolmestch y, posteriormente, ante el ministro Haroldo Brito, el interrogado reconoció que por órdenes del ex oficial de enlace entre la CNI y el ex Batallón de Inteligencia del Ejército (BIE), Francisco Zuñiga (también fallecido), se apersonó en horas de la madrugada en el cuartel Borgoño del organismo represor.

En ese lugar habría recibido la orden por parte de Álvaro Corbalán para que, junto al agente Rodrigo Pérez Martínez, trasladaran unos bultos al regimiento Peldehue, los cuales estaban enrollados como alfombras, y que posteriormente los cargaran en un helicóptero. En ese sentido, aclaró que él nunca vio los cadáveres, ni tampoco supo que en Borgoño hubieran detenidos a raíz del episodio de Carreño.

Asimismo, sostuvo que durante el período previo a ese hecho vio a miembros del Ejército -desconocidos para él- visitar los calabozos del cuartel, donde presuntamente estaban los frentistas. Ese hecho le llamó la atención dado que estaba absolutamente prohibido que personas ajenas a la CNI entraran a Borgoño.

Otro de los antecedentes que le hizo concluir a Asenjo que hubo participación del Ejército en esta operación, fue que cuando ingresaron al regimiento Peldehue los estaban esperando con el acceso despejado y nadie controló sus identidades. El vehículo se dirigió directamente a la zona en que estaba posado el helicóptero piloteado por Luis Campos y Héctor Barría, quienes fueron los encargados de arrojar los bultos que presuntamente contenían los cuerpos al océano.

Su carrera militar

Este medio tuvo acceso a una de las últimas declaraciones judiciales del teniente coronel (r) Gonzalo Asenjo Zegers, en el llamado caso Janequeo, en Quinta Normal, donde se eliminó a varios integrantes del MIR. En esa oportunidad declaró: "En el año 1971 ingresé a la Escuela Militar, cursó que duró hasta el año 1974, egresando con el grado de subteniente. En el año 1975 fuí destinado al regimiento Tacna, ubicado en Av. Tupper, lugar donde permanecí hasta el año 1978. Posteriormente me destinaron al Regimiento Dolores, ubicado en la ciudad de Arica, cumpliendo funciones hasta el año 1981. Seguidamente, en el año 1982 pasé a formar parte de la CNI, específicamente a la Brigada Bernardo O´higgins, adquiriendo el nombre operativo de "Juan Carlos Catán Caroca".

"En el año 1984 volví al Ejército, nuevamente al regimiento Dolores, permaneciendo en esa unidad hasta el año 1986, fecha en el cual regresé a formar parte de la CNI, la Brigada Bernardo O´Higgins. En el año 1988 me designaron jefe regional de la CNI en la ciudad de Copiapó, cargo que desempeñé hasta 1990. Ese mismo año me fuí trasladado al regimiento de Artillería Nº5 de Antofagasta, ubicado en esa misma ciudad, cumpliendo funciones hasta el año 1992 por cuanto regresé a la ciudad de Santiago, destinado al hospital Militar, permaneciendo en esa unidad hasta el año 1995, fecha en la cual me acogí a retiro voluntario".

"Durante el período 1982-1983, que estuve en la CNI, formé parte de la Brigada (Antisubversiva) Bernardo O´Higgins y que se encontraba bajo el mando del entonces mayor Álvaro Corbalán Castilla. Recuerdo que me correspondió desempeñarme en la Brigada de Asuntos Generales, encargada de corroborar todo tipo de información que llegara por cualquier medio respecto de situaciones que podrían ser consideradas de irregulares en dicho período. También estuve un corto período en la Brigada Amarilla, encargada de investigar al Partido Socialista, siendo designado jefe de ésta".

"En el segundo período, es decir, entre los años 1985-1989, comencé cumpliendo funciones en la Brigada Amarilla, quedando nuevamente como jefe de ésta, permaneciendo en el cargo hasta fines de 1986, fecha en la cual conformé la Brigada de Reacción, encargada de resguardar el sitio del suceso producido por cualquier hecho subversivo, hasta que llegara personal especializado, es decir, tanto de Investigaciones como de la propia CNI. En el año 1987 pasé como jefe del Departamento de Análisis de la Brigada O´Higgins, donde se analizaba la información que entregaban las Brigadas y las fuentes abiertas, la cual una vez procesada se le entregaba a don Álvaro Corbalán, quien era el encargado de ver que hacía con ella. A mediados de 1998, me designaron como jefe regional de la CNI en Copiapó, hasta el año 1990, fecha en la cual cesan mis funciones en dicho organismo".


Estos son los uniformados involucrados en violaciones de DDHH que se han suicidado desde 2005

Fuente :adn.cl, 13 de Agosto 2015

Categoría : Prensa

Tenientes, coroneles y generales se han quitado la vida privados de libertad.

El General (R) del Ejército, Hernán Ramírez Rurange, se suicidó durante la madrugada de este jueves. El hombre de 76 años terminó con su vida un día después de ser condenado por la muerte del ex químico de la DINA, Eugenio Berríos.

Es el séptimo uniformado que se suicida en los últimos 10 años, según un listado que publicó el diario La Segunda. Los otros seis, desde 2005 a la fecha, son:

17 de enero 2005
El coronel de Ejército (r), Germán Barriga, se lanzó del piso 18 de un edificio en Las Condes. El ex agente de la Dina estaba sometido a proceso por la desaparición de nueve personas, entre ellas el marido de Gladys Marín, y el padre de Viviana Díaz.

4 de octubre 2006
El teniente coronel (r) de Ejército, Gonzalo Asenjo Zegers, se suicidó de un disparo en el tórax en su departamento de Las Condes. Ex agente de la CNI, había sido procesado como encubridor en el caso de la desaparición de cinco miembros del FPMR en 1987.

24 de mayo 2007
El suboficial (r) del Ejército, Carlos Muñoz, se ahorcó al interior del Batallón de Policía Militar del Comando de Telecomunicaciones, donde cumplía prisión preventiva hacía dos meses. En enero de ese año había sido procesado por homicidio calificado en el llamado caso ‘Conferencia'.

27 de julio de 2007
El coronel (r) de Carabineros, Luis Hidalgo López, se disparó al interior de la torre del servicio dental del hospital Dipreca. Hidalgo había sido procesado como autor del secuestro y desaparición, en octubre de 1973, del militante del Mapu Juan Bautista Bastías Riquelme.

11 de febrero de 2011
El carabinero (r), Luis Henríquez Apablaza, se ahorcó en la cárcel de Temuco donde cumplía una condena de 10 años y un día por homicidio simple. Había sido condenado en 2009 por la muerte de dos campesinos ocurrida en la comuna de Freire en 1973.

28 de septiembre de 2013
El general (r) de Ejercito y ex director de la CNI, Odlanier Mena se suicidó de un disparo en la cabeza en su domicilio de Las Condes. Cumplía una pena de seis años de cárcel por el homicidio de tres dirigentes socialistas en Arica, ocurrido en octubre de 1973.