Quiroz Barra Hernán Raúl

Rut: 4808199-1

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Grado :

Rama : Investigaciones


Ministro Álvaro Mesa procesa a detective (r) por secuestro calificado de entrenador de equipo infantil de básquetbol

Fuente :pjud.cl, 15 de Julio 2022

Categoría : Prensa

El ministro en visita extraordinaria para causas por violaciones a los derechos humanos de las jurisdicciones Temuco, Valdivia, Puerto Montt y Coyhaique, Álvaro Mesa Latorre, dictó el auto de procesamiento 131 sobre la materia, por el delito de secuestro calificado del entrenador de equipo infantil de básquetbol Osvaldo del Carmen Cerna Huard. Ilícito cometido a partir 15 de noviembre de 1974, en ciudad de Temuco.

El ministro en visita extraordinaria para causas por violaciones a los derechos humanos de las jurisdicciones Temuco, Valdivia, Puerto Montt y Coyhaique, Álvaro Mesa Latorre, dictó el auto de procesamiento 131 sobre la materia, por el delito de secuestro calificado del entrenador de equipo infantil de básquetbol Osvaldo del Carmen Cerna Huard. Ilícito cometido a partir 15 de noviembre de 1974, en ciudad de Temuco.

En la resolución (causa rol 114.050), el ministro en visita encausó al entonces funcionario de la Policía de Investigaciones Hernán Raul Quiroz Barra, en calidad de autor del delito, en carácter de lesa humanidad.

En la etapa de investigación de la causa, el ministro Mesa Latorre logró reunir antecedentes suficientes para tener por acreditados: “Que inmediatamente de ocurridos los hechos del 11 de septiembre de 1973, las Fuerzas Armadas y de Orden tomaron el control de la ciudad de Temuco, erigiéndose como Gobernador de Temuco, el Coronel Pablo Iturriaga Marchesse, Comandante del Regimiento de Infantería N° 8 Tucapel de esta ciudad, quien además quedó como Jefe de la Guarnición de Temuco.

Que el mismo día 11 de septiembre de 1973, algunos integrantes de las diversas Instituciones y/o Reparticiones de Fuerzas Armadas, de Orden y de la Policía de Investigaciones de Chile, fueron designados por la Jefatura Militar a colaborar con el nuevo régimen, quienes se presentaron en el Regimiento N°8 Tucapel, a fin de apoyar la gestión de la Fiscalía Militar que funcionaba al interior de la Unidad y que estaba a cargo del Segundo Comandante, Mayor Luis Jofré Soto.

Que uno de estos grupos de personas designadas y agregados al Regimiento Infantería Tucapel N°8, estaba compuesto por Personal de la Policía de Investigaciones de Chile, entre ellos: Hernán Raul Quiroz Barra, Daniel San Juan Clavería, Aquiles Poblete, Ricardo Ortiz Lara, Luis Morales Toledo, Carlos Luco Astroza (el conductor de este grupo de agregados) y quienes de manera inmediata prestaron sus servicios en la mencionada Unidad Militar, conformando de esta manera, el grupo de agregados al Regimiento N°8, Tucapel.

Que dicho personal generalmente vestía de civil y tenía como labor ubicar, detener e interrogar a personas que poseían vinculaciones de carácter político consideradas como opositoras al Régimen Militar, para luego este equipo proceder a la detención y posterior traslado hasta los distintos lugares de detención dispuestos para tal efecto, tales como Comisarías y Regimiento Tucapel, en muchos casos, conducidas a más de un centro de detención, según lo ordenado por el Oficial al mando del respectivo operativo. De las personas detenidas por este grupo, nunca se conoció formalmente sus identidades, pues no eran presentados en la guardia para ser anotados en el libro de ingreso, permaneciendo estos detenidos, en algunas oportunidades, hasta por dos días para luego ser retirado por el mismo grupo, desconociendo posteriormente su destino.

Que Osvaldo del Carmen Cerna Huard, para el año 1974 tenía 22 años de edad, era contador, entrenador del Equipo de Basquetbol Infantil del Club Deportivo Tucapel y militante de las Juventudes del Partido Comunista. El año 1973 había realizado su Servicio Militar en el Regimiento N°8 Tucapel de Temuco, desempeñándose el año 1974 como contador, cumpliendo funciones en la Empresa Socoagro, como Jefe de Ventas. El día 15 de noviembre de 1974, luego de regresar de su trabajado y de pasar por su domicilio concurrió a visitar a uno de sus amigos, domiciliado en calle Janequeo N°1346 donde dejó un bolso con pertenencias, para luego despedirse, comunicando que tenía una reunión con dirigentes del Equipo de Básquetbol. Posterior a ello, aproximadamente a las 20:00 horas después de la reunión, Osvaldo Cerna se encontraba conversando, con un conocido frente al Gimnasio de la Escuela Estándar N°5, ubicada en Pasaje Rebolledo de la Ciudad de Temuco, en donde se disponía a dirigir el entrenamiento del referido equipo infantil, momento en el cual es detenido por dos personas vestidas de civil, siendo estos funcionarios de Policial de Investigaciones agregados al Regimiento Tucapel, entre ellos José Hernán Quiroz Barra, los cuales lo trasladaron hacia el Cuartel de Policía de Investigaciones de Temuco. Lo anterior por cuanto en dicho lugar se encontraba Néstor Araneda Cabezas, Inspector de la citada Unidad Policial y amigo de Osvaldo, el que en declaración libre y voluntaria ante la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación de fecha 11 de diciembre de 1990 expone que ‘encontrándose él, en el casino de la Unidad, vio que el señor Quiroz traía a un detenido encapuchado el cual reconoció por su vestimenta y estatura como Osvaldo del Carmen Cerna Huard, posteriormente se dirigió a la Guardia a preguntar por Osvaldo y el Oficial le indicó que el referido se encontraba en ‘cana’ haciéndole entrega de los Carnés del Deportivo Tucapel’. Araneda, a continuación relata que ‘esa misma noche bajó a conversar con Osvaldo, en el calabozo, él que le expresó ‘que se encontraba asustado’, a lo cual Araneda le indico ‘que mientras él estuviera ahí, no tendría problemas’. Agrega Araneda que ‘al otro día en la mañana constató que Osvaldo ya no se encontraba en las dependencias de la Unidad Policial y que en horas de la madrugada había sido sacado por José Hernán Quiroz Barra, con destino desconocido’.

Que lo anteriormente expuesto por el señor Araneda se puede corroborar por los dichos de la familia de Osvaldo ya que el día en que Osvaldo Cerna desapareció, como ya era de noche y todavía no llegaba a su casa, su madre doña Marta Elena Huard y su hermana Patricia Cerna se preocuparon y fueron hasta la casa de la familia Torres Marín, a preguntar por Osvaldo, a lo que le respondieron, tanto don Héctor y doña Norma, ‘que efectivamente había estado allí, pero que había dejado un bolso y que se había retirado sin que supieran de su paradero’. Al día siguiente, sábado 16 de noviembre 1974, amigos de la familia; Héctor Fuentes, Yolanda Marín, Isaac Cerna Cerna, tío de Osvaldo y los hermanos de Osvaldo, Patricia y Jorge, fueron a la Policía de Investigaciones a preguntar por él, ya que anteriormente había sido detenido en dicha Unidad, por pertenecer al Partido Comunista. En ese lugar, se encontraba Néstor Araneda, el cual los hizo pasar a su oficina, y quien al ser consultado negó que Cerna Huard estuviera detenido ahí e indicó que ‘Osvaldo no se encontraba en la lista de detenidos y que aun cuando él estuviera en el servicio le estaba prohibido dar cualquier clase de información’. En la oficina de dicho funcionario, pudieron ver, que ‘sobre el escritorio había varios carnés, unos diez o doce aproximadamente, correspondientes a carnés deportivos de un color rojo vivo y naranjo fuerte’, identificando, que ‘esos carnés tenían fotos de niños, momento en el cual Araneda se percató de que estaban observando esos documentos y los guardó en un cajón de su escritorio’. Al salir de ese lugar, Jorge Cerna señaló que ‘reconoció esos carnés y que estos eran los que su hermano Osvaldo portaba en su chaqueta, los cuales pertenecían al Club Deportivo Tucapel. En ese intertanto Araneda le indica a Jorge ‘que le diga a su madre que tenga paciencia y que espere tranquila’, señalándole ‘que es totalmente posible que se encuentre detenido y que se acuerde que cuando él estuvo detenido, fue por equivocación, pues la orden era para su hermano’, agregando ‘que no sería raro que se encontrara aquí, pero que no está en la lista’. Momento después de esa conversación y con la impresión de que Araneda, por estar en la Unidad Policial no pudo conversar tranquilamente, Norma Marín y Miguel Torres, amigos de Osvaldo, fueron a la casa de Néstor Araneda, el cual al ser nuevamente consultado por si tenía conocimiento del paradero de Osvaldo, señaló que el viernes 15 en la noche había existido una redada en la cual se detuvieron a varias personas, pero que ignoraba si Cerna Huard se encontraba allí, señalando que al día siguiente, vale decir el domingo 15, él estaría de guardia en la Unidad, por lo cual, le indicó a Miguel que fuera como a las nueve de la mañana y allí él vería si Osvaldo se encontraba detenido, expresándole a la vez que lleve una chomba, esto por si acaso, Cerna Huard estaba detenido. Miguel fue aquel día y Araneda le señaló que no se encontraba Osvaldo en ese lugar.

Que producto de la desaparición de Cerna Huard se inició una investigación ordenada por el Tribunal, en la que le correspondió al Sargento Segundo de Carabineros Juan Fritz Vega realizar algunas gestiones el cual señala que ‘mientras estuvo efectuando indagaciones en mérito de la orden de investigar emanada por el Tribunal, fue al Servicio de Investigaciones y exhibió la fotografía de Osvaldo a varios funcionarios que allí habían, entre ellos, Juan Antivil, quienes al mirar la fotografía se notaron medios turbados y sorprendidos y respondieron que no estaba allí’ agrega que ‘por todos los datos que la investigación arrojó sobre estos hechos manifiesta al Tribunal que Osvaldo Cerna puede haber sido detenido por el Servicio de Investigaciones de esta ciudad…’ Ocho días después de la desaparición de Osvaldo, esto es el día 23 de noviembre de 1974, se publicó este hecho en el Diario Austral de Temuco, indicando precisamente ‘que había desaparecido y que su familia lo estaba buscando, sin tener hasta esa fecha certeza sobre su paradero’. Posteriormente con fecha 30 de diciembre de 1974 ante la Corte de Apelaciones de Temuco, y con fecha 21 de febrero de 1975, ante la Corte de Apelaciones de Santiago, la familia, presentó Recursos de Amparo los que no se acogieron, y finalmente doña Marta Huard presentó en julio de 1979 denuncia por presunta desgracia, ante Ministro Alfredo Meynet González, quien investigaba los casos de Detenidos Desaparecidos, en Departamento de Temuco, quien se declaró incompetente y remitió los antecedentes al 4° Juzgado Militar de Valdivia, el cual posteriormente sobreseyó total y definitivamente la causa, sin que a la fecha, se tenga antecedentes de su paradero”.


Procesan a ex PDI de Temuco por desaparición de joven entrenador de equipo infantil de básquetbol en 1974

Fuente :resumen.cl, 21 de Julio 2022

Categoría : Prensa

El ministro en visita extraordinaria para causas por violaciones a los derechos humanos de las jurisdicciones Temuco, Valdivia, Puerto Montt y Coyhaique, Álvaro Mesa Latorre, dictó auto de procesamiento por el delito de secuestro calificado del entrenador de equipo infantil de básquetbol Osvaldo del Carmen Cerna Huard, perpetrado a partir 15 de noviembre de 1974, en la ciudad de Temuco.

En la resolución (causa rol 114.050), el ministro en visita encausó al entonces detective de la Policía de Investigaciones (PDI) Hernán Raúl Quiroz Barra, en calidad de autor del delito de secuestro calificado, en carácter de lesa humanidad.

El procesado Quiroz Barra, exinspector de la PDI, formó parte de la dotación de funcionarios de Investigaciones que inmediatamente después del golpe militar, fueron agregados a cumplir funciones represivas en el Regimiento de Infantería N° 8 "Tucapel", de Temuco. Esta unidad militar, que actuaba como centro operativo de la represión uniformada sobre la provincia de Cautín, se encontraba bajo el mando del entonces Coronel de Ejército Pablo Iturriaga Marchesse, quien ejercía además como Jefe de Guarnición de Temuco.

Para ejercer la labor represiva en forma selectiva sobre personas de izquierda y organizaciones populares afines al derrocado gobierno de Allende, el uniformado Iturriaga Marchesse organizó un comando bajo la tutela de la Sección Dos del Regimiento "Tucapel" al que se debían sumar funcionarios de la Fach, de Carabineros y de Investigaciones de Temuco. Este centro operativo al interior del mencionado regimiento estaba a cargo del entonces mayor de Ejército y segundo comandante de la unidad, Luis Armando Jofré Soto.

Este comando represor se encargó de perseguir y detener a centenares de personas que fueron ingresadas a diversos lugares de detención para luego ser derivadas al Regimiento "Tucapel" o llevados directamente al centro de prisioneros en esta unidad militar, en donde se decidía su destino; muchos fueron los  asesinados, otros tantos desaparecidos por la acción criminal de este ente del terror. Los agregados por la Policía de Investigaciones a este cuerpo represivo centralizado fueron Hernán Raúl Quiroz Barra,  Daniel San Juan Clavería, Aquiles Poblete Müller, Rigoberto Ortiz Lara, Luis Morales Toledo, Carlos Zurita Panguilef, y Carlos Luco Astroza, entre otros.

Como parte de estas acciones represivas, el 15 de noviembre de 1974, fue detenido el joven Osvaldo del Carmen Cerna Huard, de 22 años de edad, de profesión contador, entrenador del Equipo de Basquetbol Infantil del Club Deportivo Tucapel y militante de las Juventudes del Partido Comunista. El año 1973 había realizado el servicio militar obligatorio en el propio Regimiento N°8 "Tucapel", y para 1974 trabajaba como jefe de ventas en la Empresa Socoagro.

El día en que le detuvieron, luego de regresar de su trabajo y de pasar por su domicilio, Osvaldo Cerna concurrió a visitar a uno de sus amigos y a una reunión que tenía con dirigentes del Equipo de Básquetbol. Después de la reunión, aproximadamente a las 20:00 horas, se encontraba conversando con un conocido frente al Gimnasio de la Escuela Estándar N°5, ubicada en Pasaje Rebolledo, en donde se disponía a dirigir el entrenamiento del equipo infantil, momento en el cual es detenido por dos personas vestidas de civil, siendo estos funcionarios de Policial de Investigaciones agregados al Regimiento "Tucapel", entre ellos Hernán Raúl Quiroz Barra, los cuales lo trasladaron hacia el Cuartel de Policía de Investigaciones de Temuco.

En la investigación judicial se establece que, en esa oportunidad, en dicho cuartel se encontraba Néstor Araneda Cabezas, Inspector de esa Unidad Policial y amigo de Osvaldo, el que en declaración libre y voluntaria prestada ante la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación expuso que 'encontrándose él, en el casino de la Unidad, vio que el señor Quiroz traía a un detenido encapuchado el cual reconoció por su vestimenta y estatura como Osvaldo del Carmen Cerna Huard, posteriormente se dirigió a la Guardia a preguntar por Osvaldo y el Oficial le indicó que el referido se encontraba en 'cana' haciéndole entrega de los Carnés del Deportivo Tucapel'. Araneda, a continuación relata que 'esa misma noche bajó a conversar con Osvaldo, en el calabozo, él que le expresó 'que se encontraba asustado', a lo cual Araneda le indico 'que mientras él estuviera ahí, no tendría problemas'. Agrega Araneda que 'al otro día en la mañana constató que Osvaldo ya no se encontraba en las dependencias de la Unidad Policial y que en horas de la madrugada había sido sacado por Hernán Raúl Quiroz Barra, con destino desconocido'. Desde entonces Osvaldo Cerna Huard permanece como detenido desaparecido.


Declaran culpable a exdetective por secuestro de entrenador del Deportivo Tucapel de Temuco en 1974

Fuente :biobiochile.cl, 9 de Octubre 2022

Categoría : Prensa

Dictan acusación contra detective en retiro por el secuestro calificado del entrenador de básquetbol infantil del Deportivo Tucapel de Temuco en 1974.

La Justicia calificó como autor de un secuestro cometido en dictadura a un exdetective de la Policía de Investigaciones. Lo anterior por el delito de lesa humanidad cometido en contra de un entrenador de básquetbol del Deportivo Tucapel de Temuco, región de La Araucanía.

Se trata del oficial de la Policía de Investigaciones en retiro, Hernán Raúl Quiroz Barra, que desde julio de este año estaba sometido a proceso por la causa.

En ese contexto, el ministro Álvaro Mesa, en visita extraordinaria de la Corte de Apelaciones de Temuco para causas de violaciones a los derechos humanos durante la dictadura, acusó como autor del secuestro calificado de Osvaldo del Carmen Cerna Huard.

Hasta hoy no se conoce su paradero

La víctima, militante de las Juventudes del Partido Comunista, en 1974 tenía 22 años de edad y se desempeñaba como entrenador del equipo de basquetbol infantil del Club Deportivo Tucapel.

Además, Cerna trabajaba como contador, cumpliendo funciones en la empresa Socoagro.

Fue el 15 de noviembre de 1974, cuando Osvaldo se encontraba conversando con un conocido frente al gimnasio de la Escuela Estándar N°5, en donde se disponía a dirigir el entrenamiento del referido equipo infantil.

En ese momento fue detenido por dos personas vestidas de civil, siendo estos funcionarios de la Policía de Investigaciones, agregados al Regimiento Tucapel.

Hasta hoy, su paradero sigue siendo desconocido.


Condenan a 23 ex miembros del Ejército, Carabineros, PDI y civiles por crímenes cometidos en Temuco en 1973 en el Caso Polvorín

Fuente :resumen.cl, 22 de Septiembre 2023

Categoría : Prensa

El ministro en visita extraordinaria para causas por violaciones a los derechos humanos de las jurisdicciones de las Cortes de Apelaciones de Temuco, Valdivia, Puerto Montt y Coyhaique, Álvaro Mesa Latorre, condenó a  23 militares en retiro y colaboradores del Ejército por su responsabilidad en los homicidios calificados y apremios ilegítimos en contra de Florentino Alberto Molina Ruiz, Juan Antonio Chávez Rivas, Víctor Hugo Valenzuela Velásquez, Juan Carlos Ruiz Mancilla, Amador Francisco Montero Mosquera, Pedro Juan Mardones Jofré y  Carlos Aillañir Huenchual, perpetrados en la comuna de Temuco, en noviembre de 1973.

En la sentencia (rol 113.089) el ministro Mesa Latorre condenó al civil "scar Alfonso Ernesto Podlech Michaud, exfiscal militar de la dictadura, a presidio perpetuo por su responsabilidad como autor de los 7 homicidios calificados y 10 años de presidio por su responsabilidad como autor de 7 delitos de apremios ilegítimos a las siete víctimas.

En tanto, los ex PDI Daniel San Juan Clavería, Hernán Raúl Quiroz Barra los ex suboficiales de Ejército Orlando Moreno Vásquez y Raúl Binaldo Schonherr Frías,  y el ex suboficial de Carabineros Omar Burgos Dejean,  deberán cumplir una pena de presidio perpetuo como cómplices de los 7 homicidios calificados y una pena de 10 años de presidio como autores de apremios ilegítimos.

Los acusados ex oficiales de Ejército  Jaime Guillermo García Covarrubias, Pablo Domingo Gran López, Romilio Osvaldo Lavín Muñoz, Carlos Eduardo Oviedo Arriagada, Raimundo Ignacio García Covarrubias, Norberto Francisco Uribe Moroni, Pedro Guillermo Manuel Tichahuer Salcedo, y el suboficial Juan Bautista Labraña Luvecce, purgarán penas de presidio perpetuo como cómplices de los 7 homicidios calificados y 427 días de prisión como cómplices de los 7 apremios ilegítimos.

El ex oficial de Ejército Manuel Abraham Vásquez Chahuán cumplirá una pena de presidio perpetuo como autor de los 7 homicidios calificados.

Además, los ex soldados conscriptos Gabriel Alfonso Dittus Marín, Héctor Mauricio Villablanca Huenulao, Sergio Orlando Vallejos Garcés, Juan Carlos Concha Belmar, Manuel Rafael Campos Ceballos cumplirán una pena de presidio perpetuo como cómplices de los 7 homicidios calificados.

Arnoldo Aedo Matus cumplirá una pena de 20 años de presidio como cómplice de los 7 homicidios.

Libardo Hernán Schwartenski Rubio purgará pena de 10 años de presidio como autor de 7 delitos de apremios ilegítimos.

Finalmente José Raúl Inzunza Reyes fue condenado a 427 días de prisión como autor de 7 delitos de apremios ilegítimos.

En la investigación judicial queda establecido que tras el golpe militar de septiembre de 1973 las fuerzas armadas y policiales tomaron el control de la ciudad de Temuco, erigiéndose como Intendente el Coronel Comandante del Regimiento «La Concepción», de Lautaro, Hernán Jerónimo Ramírez Ramírez (fallecido) y como Gobernador de Temuco, el Coronel Pablo Iturriaga Marchesse (fallecido), Comandante del Regimiento de Infantería N° 8 «Tucapel» de esta ciudad, quien además quedó como Jefe de la Guarnición de Temuco.

En la misma fecha fue llamado a colaborar con el nuevo régimen el abogado Oscar Alfonso Ernesto Podlech Michaud, que además era teniente de reserva, para apoyar la gestión de la Fiscalía Militar que funcionaba al interior de la unidad y que estaba a cargo del Segundo Comandante, Mayor Luis Jofré Soto (fallecido):

Bajo las órdenes de esa comandancia y de la Fiscalía, la labor represiva se concentró en el Regimiento «Tucapel» de Temuco. En ese recinto operaba la Sección Segunda de Informaciones e Inteligencia que estaba a cargo del Capitán Nelson Manuel Uldaricio Ubilla Toledo (fallecido), bajo cuya dependencia desarrollaban funciones algunos suboficiales entre los que se encontraban Juan Bautista Labraña Luvecce, Orlando Moreno Vásquez, Raúl Binaldo Schonherr Frías. Después del golpe, la labor represiva del Regimiento fue reforzada con la agregación de funcionarios de Investigaciones Aquiles Alfonso Poblete Müller (fallecido), Daniel San Juan Clavería y Hernán Raúl Quiroz Barra, y de Carabineros, entre los que se encontraba Omar Burgos Dejean. De igual modo se sumaron a las tareas de inteligencia algunos oficiales entre los que se encontraba Manuel Abraham Vásquez Chahuán, además de clases y conscriptos del regimiento.

Dentro de la mencionada unidad militar se formó un grupo especial denominado «Patrulla Brava» o «Patrulla Chacal» integrado por soldados clase y conscriptos de la Segunda Compañía de Cazadores, entre los que se encontraban Manuel Rafael Campos Ceballos, Juan Carlos Concha Belmar, Sergio Orlando Vallejos Garcés, Gabriel Alfonso Dittus Marín, Héctor Mauricio Villablanca Huenulao, Juan Humberto Carrillo Rebolledo y Libardo Schwartenski Rubio, bajo las órdenes del Subteniente Manuel Espinoza Ponce (fallecido), quien a su vez recibía órdenes del Teniente Manuel Abraham Vásquez Chahuán, que estaba al mando de la Compañía. Este grupo se encargaba, entre otras funciones, de custodiar a los detenidos que eran mantenidos en las dependencias del regimiento «Tucapel» de Temuco.

Entre las acciones represivas que se ejecutaban al interior del Regimiento estaban los apremios ilegítimos y torturas a que eran sometidos los prisioneros y prisioneras que eran detenidos y confinados en dependencias de esa unidad. Producto de esas actividades criminales resultaron muertas o desaparecidas un número importante de personas en la IX región, las que eran explicadas por medio de bandos militares.

Un bando del 10 de noviembre de 1973, daba cuenta de que se había producido un intento de asalto al polvorín del Regimiento "Tucapel", produciéndose un enfrentamiento en que resultaron muertas las personas víctimas de esta causa: Florentino Alberto Molina Ruiz, Juan Antonio Chávez Rivas, Víctor Hugo Valenzuela Velásquez, Juan Carlos Ruiz Mancilla, Amador Francisco Montero Mosquera, Pedro Juan Mardones Jofré, y Carlos Aillañir Huenchual, todos ellos militantes y dirigentes del Partido Comunista en la zona. En los hechos se trató se asesinatos o ejecuciones de prisioneros políticos cometidas en el polígono del Regimiento.

Florentino Alberto Molina Ruiz, de 44 años, miembro del Comité Central y Secretario Regional del Partido Comunista, fue detenido y sacado desde su domicilio el lunes 5 de noviembre de 1973 por dos carabineros miembros de la Comisión Civil, quienes lo trasladaron hasta la Segunda Comisaría de Carabineros de Temuco. En la madrugada del día siguiente fue trasladado hasta el Regimiento «Tucapel» de Temuco por orden de la Fiscalía Militar de Temuco.

Juan Antonio Chávez Rivas, de 26 años, estudiante de la Universidad Técnica del Estado, Secretario Regional y miembro del Comité Central de las Juventudes Comunistas, fue detenido el 6 de noviembre de 1973 por dos carabineros miembros de la Comisión Civil, quienes lo trasladaron hasta la Segunda Comisaría de Carabineros de Temuco; al día siguiente fue trasladado hasta el Regimiento «Tucapel» de Temuco.

Víctor Hugo Valenzuela Velásquez, de 22 años, empleado público y Secretario de propaganda de las Juventudes Comunistas de Cautín, fue detenido el 7 de noviembre de 1973, alrededor de las 10:00 h, en el Conservador de Bienes Raíces de Temuco, donde trabajaba. El personal aprehensor, que vestía de civil, pertenecía al Servicio de Inteligencia del ejército, siendo uno de ellos un Sargento del Regimiento «Tucapel» de Temuco.

Juan Carlos Ruiz Mancilla, de 21 años, estudiante de Construcción Civil en la Universidad Técnica del Estado y miembro de las Juventudes Comunistas, con posterioridad al 11 de septiembre de 1973 viajó hasta la ciudad de Punta Arenas donde vivían sus padres. En ese lugar fue detenido el día 7 de noviembre de ese mismo año y trasladado en avión hasta Temuco, donde fue llevado al Regimiento «Tucapel».

Amador Francisco Montero Mosquera, de 21 años, estudiante de Ingeniería Eléctrica de la Universidad Técnica del Estado y miembro de las Juventudes Comunistas, fue detenido en su domicilio el día 7 de noviembre de 1973 por personal de la Comisión Civil de Carabineros y trasladado hasta el Regimiento Tucapel de Temuco.

Pedro Juan Mardones Jofré, de 22 años, estudiante de la Universidad Técnica del Estado, fue detenido en su domicilio y trasladado hasta el Regimiento Tucapel de Temuco.

Mientras que Carlos Aillañir Huenchual, de 57 años, agricultor y simpatizante del gobierno de la Unidad Popular, fue detenido en el sector rural de Pelales, en la localidad de Quepe, el día 6 de noviembre de 1973 por una patrulla militar del Regimiento "Tucapel" que se movilizaba en un camión institucional.

Al final del día 10 de noviembre de 1973, los mencionados detenidos fueron subidos a un vehículo militar y, bajo el mando de Manuel Abraham Vásquez Chahuán, les trasladan hasta el sector del polígono, denominado "Isla Cautín", por los oficiales y sus acompañantes.

En ese lugar, las víctimas fueron amarradas a unas estacas que se encontraban allí dispuestas en hilera. Poco tiempo después, se sumaron al grupo de efectivos militares presentes en ese sector el capitán Rodolfo Vargas Campos (fallecido), el sargento Hernán Rodrigo Santiesteban Domínguez (fallecido), el sargento Anacleto Aguirre Rivera (fallecido), todos de la 1a Compañía de Cazadores, más el sargento José Gajardo Gajardo (fallecido) y el sargento Arnoldo Aedo Matus de la 2a Compañía de Cazadores.

Una vez que la patrulla comandada por el Capitán Vargas llegó al lugar, este ordenó que sus integrantes se dispusieran detrás de los detenidos que se encontraban amarrados a las estacas, con excepción de Arnoldo Aedo Matus a quien le dijo que se ubicara en un lugar distante y que procediera a efectuar disparos hacia los árboles ubicados en otro sector.

Aedo Matus pudo apreciar que en el lugar se encontraban presentes el Comandante del regimiento, Coronel Pablo Iturriaga Marchesse (fallecido), quién se hacía acompañar por otro oficial, y que además presenciaban las maniobras de ejecución dos civiles, siendo uno de ellos el abogado asesor de la Fiscalía Militar de Temuco Oscar Alfonso Ernesto Podlech Michaud.

En esas condiciones los detenidos fueron ejecutados en el lugar uno por uno y rematados mediante ráfagas de armas de fuego, tras lo cual sus cuerpos fueron derivados a la morgue del hospital regional de Temuco donde se les practicó la autopsia de rigor.

Finalmente, se elaboró un bando militar para ser publicado en la prensa del día siguiente en el que se daba cuenta de un intento de asalto al polvorín de la Isla Cautín, por parte de un grupo de extremistas.

por Darío Núñez