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Castillo Whyte Ruben Crisostomo – Memoria Viva

Castillo Whyte Ruben Crisostomo

Rut: 2.244.086-1

Cargos: Intendente de Cauquenes Comandante del Regimiento de Infantería Andalién, Cauquenes

Grado : Teniente Coronel

Rama : Ejército


Decreto Ley Número 4 -1973 (Chile): DECLARA EN ESTADO DE EMERGENCIA LAS PROVINCIAS Y DEPARTAMENTOS QUE INDICA

Fuente :Decreto ley N.o 4.- Santiago, 11 de Septiembre de 1973.

Categoría : Otra Información

Identificación Norma: DL-4
Fecha Publicación: 18.09.1973
Fecha Promulgación: 11.09.1973
Organismo: MINISTERIO DE DEFENSA NACIONAL; SUBSECRETARIA DE GUERRA
Estado: ORIGINAL 

DECLARA EN ESTADO DE EMERGENCIA LAS PROVINCIAS Y DEPARTAMENTOS QUE INDICA

Decreto ley N.o 4.- Santiago, 11 de Septiembre de 1973.- 

Vistos:  Lo dispuesto en el decreto ley N° 1 de esta fecha y considerando que el país se encuentra en la situación prevista en el artículo 31, inciso segundo de la ley N° 12.927, de 6 de Agosto de 1958, la Junta de Gobierno de la República de Chile ha acordado y decreta el presente, 

Decreto-ley: 
Artículo 1°.-
Declárase a partir de esta fecha en Estado de Emergencia, hasta por el plazo máximo previsto en el Art. 31, inciso segundo de la ley N° 12.927, a las provincias y departamentos que a continuación se indican y desígnase Jefes de ellas a los siguientes Oficiales de las Fuerzas Armadas, con todas las facultades determinadas en los artículos 33 y 34 del mismo cuerpo legal:
 

  • a) Provincia de Tarapacá. (Excepto Departamento de Arica). – General de Brigada don CARLOS FORESTIER HAENSGEN (Rol Contraloría N° 30.344 – RUN: En trámite)
  • b) Departamento de Arica. – Coronel don ODLANIER MENA SALINAS (Rol Contraloría N° 52.426 – RUN: 1.912.932-2).
  • c) Provincia de Antofagasta. (Excepto Departamento de El Loa). – General de Brigada don JOAQUIN LAGOS OSORIO (Rol Contraloría N° 44.678 – RUN: En trámite).
  • d) Departamento de El Loa. – Coronel don EUGENIO RIVERA DESGROUX (Rol Contraloría N° 71.358 – RUN: En trámite).
  • e) Provincia de Atacama. (Excepto Departamentos de Huasco y Freirina). – Teniente Coronel don OSCAR HAAG VLASCHKE (Rol Contraloría N° 38.901 – RUN: 2.529.747-2).
  • f) Provincia de Coquimbo y Departamentos de Huasco y Freirina. – Teniente Coronel don ARIOSTO LAPOSTOL ORREGO (Rol Contraloría N° 44.943 – RUN: O.192.137-2).
  • g) Provincia de Aconcagua. – Coronel don HECTOR OROZCO SEPÚLVEDA (Rol Contraloría N° 61.247 – RUN: 2.325.826-9).
  • h) Provincia de Valparaíso. – Contralmirante don ADOLFO WALBAUM WIEBER (Rol Contraloría N° 091.395 – RUN: En trámite).
  • i) Provincia de Santiago. – General, de Brigada don HERMAN JULIO BRADY ROCHE (Rol Contraloría N° 11.825 – RUN: 0.604.372-0).
  • j) Provincia de O'higgins. – Teniente Coronel don CRISTIAN ACKERKNECHT SAN MARTIN (Rol Contraloría N° 438 – RUN: En trámite).
  • k) Provincia de Colchagua. – Coronel don HERNAN BRANTES MARTINEZ (Rol Contraloría N° 11.826 – RUN: 1.929.241-K).
  • l) Provincia de Curicó. – Teniente Coronel don SERGIO ANGELOTTI CADIZ (Rol Contraloría N° 4.200 – RUN: 2.596.800-K).
  • m) Provincia de Talca. – Teniente Coronel don EFRAIN JAÑA GIRON (Rol Contraloría N° 42.446 – RUN: 2.127.320-0).
  • n) Provincia de Linares. – Coronel don GABRIEL DEL RIO ESPINOZA (Rol Contraloría N° 70.591 – RUN: 1.696.269-4).
  • ñ) Provincia de Maule. – Teniente Coronel don RUBEN CASTILLO WHYTE (Rol Contraloría N° 17.998 – RUN: 2.244.086-1).
  • o) Provincia de Ñuble. – Coronel don JUAN G.TORO DAVILA (Rol. Contraloría N° 83.325 – RUN: 2.155.397-2).
  • p) Provincias de Concepción y Arauco (Excepto Departamentos de Talcahuano y Tomé). – General de Brigada don WASHINGTON CARRASCO FERNANDEZ (Rol Contraloría N° 16.779 – RUN: 1.850.021-3).
  • q) Departamento de Talcahuano y Tomé. – Contralmirante don JORGE PAREDES WETZER (Rol Contraloría 063.636 – RUN: 4.465.524-1).
  • r) Provincia de Bío-Bío. – Coronel don ALFREDO REHREN PULIDO (Rol Contraloría N° 69.713 – RUN: 1.816.204-0).
  • s) Provincia de Malleco (Excepto Departamento de Angol). – Teniente Coronel don ELIOS BACIGALUPO SORACCO (Rol Contraloría Nº 7.880 – RUN: 2.129.904-9).
  • t) Departamento de Angol. – Teniente Coronel don ALEJANDRO MOREL DONOSO (Rol Contraloría Nº 56.184 – RUN: 2.128.185-9).
  • u) Provincia de Cautín (Excepto Departamento de Temuco). – Coronel don HERNAN J. RAMIREZ RAMIREZ (Rol Contraloría Nº 69.108 – RUN: 1.803.092-6).
  • v) Departamento de Temuco. – Teniente Coronel don PABLO ITURRIAGA MARCHESSE (Rol Contraloría Nº 042.301 – RUN: 2.128.575-7).
  • w) Provincia de Valdivia. – General de Brigada don HECTOR BRAVO MUÑOZ (Rol Contraloría Nº 12.165 – RUN: En trámite).
  • x) Providencia de Osorno. – Teniente Coronel don LIZARDO SIMON ABARCA MAGGI (Rol Contraloría Nº 63 – RUN: 2.595.174-3).
  • y) Provincias de Llanquihue y Chiloé. – Coronel de Aviación don SERGIO LEIGH GUZMAN (Rol Contraloría Nº 96.094 – RUN: 1.828.106-6).
  • z) Provincia de Aysen. – Coronel don HUMBERTO GORDON RUBIO (Rol Contraloría Nº 37.150 – RUN: 2.128.839-k).
  • z') Provincia de Magallanes. – General de División don MANUEL TORRES DE LA CRUZ (Rol Contraloría Nº 83.693 – RUN: 566.614-7).

Artículo 2º.-
Todas las Fuerzas de Ejército, Armada, Fuerza Aérea, Carabineros de Chile e Investigaciones que se encuentren o lleguen al territorio jurisdiccional de estas Zonas de Emergencia, se pondrán bajo la autoridad del Jefe respectivo. 

Regístrese en la Contraloría General de la República, publíquese en el Diario Oficial e insértese en los Boletines Oficiales del Ejército, Armada, Fuerza Aérea, Carabineros e Investigaciones y en la Recopilación Oficial de dicha Contraloría. 

AUGUSTO PINOCHET UGARTE, General de Ejército, Comandante en Jefe del Ejército.-
JOSE T. MERINO CASTRO, Almirante, Comandante en Jefe de la Armada.-
GUSTAVO LEIGH GUZMAN, General del Aire, Comandante en Jefe de la Fuerza Aérea.-
CESAR MENDOZA DURAN, General, Director General de Carabineros.-

Lo que se transcribe para su conocimiento.-
René C. Vidal Basauri, Teniente Coronel, Jefe Depto. Asuntos Especiales, Subsecretario de Guerra subrogante.-


Suprema ordena reabrir investigación por desaparición de Bautista Van Schouwen

Fuente :El Mercurio,, 29 de Diciembre 2005

Categoría : Prensa

El proceso había sido sobreseído definitivamente por la justicia militar, razón por la cual los abogados de su familia recurrieron de casación al máximo tribunal, el que acogió los recursos y procedió a ordenar que la causa vuelva a sumario

SANTIAGO.- La Segunda Sala de la Corte Suprema resolvió reabrir la investigación por el secuestro y desaparición del ex dirigente del MIR Bautista Van Schouwen, quien fue aprehendido el 13 de diciembre de 1973 y cuyo destino aún se desconoce.

El proceso había sido sobreseído definitivamente por la justicia militar, razón por la cual los abogados de su familia recurrieron de casación al máximo tribunal, el que acogió los recursos y procedió a ordenar que la causa vuelva a sumario.

Van Schouwen, miembro del comité central del MIR, fue detenido en la parroquia de los Padres Capuchinos en el centro de Santiago junto a Patricio Munita y un tercero no identificado. Desde ese lugar fueron sacados por funcionarios de Carabineros y militares que lo llevaron con destino desconocido en tres furgones.

El cadáver de Munita fue encontrado en el patio 29 del cementerio general, pero el de Van Schouwen nunca apareció.

A juicio de la Corte Suprema, los hechos dicen relación con los delitos de homicidio, arresto ilegal y secuestro calificado, y "debe ser objeto de una acuciosa y celosa investigación de parte del fiscal militar que corresponda, debiendo decretarse todas las diligencias que sean menester para determinar la forma y circunstancia en que ocurrieron los hechos".

Tras revisar el expediente, los ministros de la Segunda Sala consideraron que existen diligencias importantes que no se realizaron en la indagatoria, por lo que ordena que se realicen algunas específicas.

Entre ellas, el máximo tribunal dictaminó que se debe investigar a fin de establecer la existencia y paradero de un oficial de Ejército llamado Rubén Castillo White, con el fin de que sea citado a prestar declaración.

Asimismo, ordena que se cite nuevamente al sacerdote capuchino Sergio Uribe Gutiérrez quien deberá ser interrogado pormenorizadamente sobre los hechos que describió ante la justicia militar en septiembre de 1996.

También ordena que se cite a los sacerdotes de la misma congregación Orlando Córdova y Rafael del Piano, con el fin de que describan los hechos ocurridos en la parroquia desde la llegada de Munita y Van Shouwen hasta la detención de que fueron objeto.

La resolución fue dictada por los ministros Alberto Chaigneau, Enrique Curi, Nibaldo Segura, Jaime Rodríguez Espoz, Rubén Ballesteros y el auditor general del Ejército Juan Romero, quien estuvo por confirmar el sobreseimiento del caso.

Van Schouwen era casado y padre de un hijo al momento de su captura. Estaba siendo buscado por los servicios de seguridad que habían ofrecido una recompensa por su detención, que ascendía a 500 mil escudos.


La Caravana de la Muerte – Un Caso de Exterminio y Crimen de Lesa Humanidad

Fuente :caravanadelamuerte.blogspot.com, 4 de Octubre 2013

Categoría : Prensa

La Caravana de la Muerte es la comitiva militar que partió el 30 de septiembre de 1973, luego del Golpe de Estado,recorriendo el sur y norte de Chile en un viaje de exterminio que cobró 105 víctimas. La misión fue ordenada por Augusto Pinochet y quedo a cargo de Sergio Arellano Stark, uno de los más importantes conspiradores del Golpe de Estado. Linares 4 víctimas, Temuco 9, Valdivia 12, Cauquenes 4, Curicó 2, La Serena 15, Copiapó 16, Antofagasta 14, Calama 26 y Arica 3. Total 105 víctimas.

Caravana de la Muerte Cauquenes – 4 de octubre de 1973.

  «Sergio Arellano Stark – durante más de dos años de investigaciones – sostuvo que nunca estuvo en Cauquenes ese fatídico 4 de octubre de 1973»

 El relato de lo ocurrido en Cauquenes lo obtuvo el ministro Juan Guzmán de boca del coronel Rubén Castillo Whyte, comandante del regimiento, en enero de 1999, que a los 73 años, recordaba claramente lo ocurrido:

"El 4 de octubre de 1973, alrededor de las 11.00 horas, llegó un helicóptero militar al patio de honor del regimiento. De dicha nave descendieron el general Sergio Arellano Stark, los oficiales Pedro Espinoza Bravo, Marcelo Moren Brito, Armando Fernández Larios y otros con uniforme de combate y armamento". No, no iba Sergio Arredondo. De eso estaba seguro el comandante Castillo Whyte porque habían trabajado juntos en el Comando de Institutos Militares.

Estando ya en la oficina de la comandancia, agregó el coronel Castillo Whyte, "el general Arellano me indicó que debía revisar los procesos. Le contesté que los detenidos estaban en el Cuartel de Investigaciones y en la cárcel de Cauquenes, que las causas estaban en proceso de sumario, aún sin sentencia del consejo de guerra. Ante esto me pidió el registro de los detenidos, cuyo documento estaba en la oficina de la Intendencia, lugar al cual nos dirigimos".

Tras estudiar Arellano y sus oficiales el registro de detenidos, "el general Arellano, con un lápiz en la mano, señalizó con una marca varios nombres, tomando en consideración la columna delito que se le acusa y ordenó a Pedro Espinoza Bravo que, con Marcelo Moren Brito y Armando Fernández Larios, se dirigieran al Cuartel de Investigaciones y a la cárcel de Cauquenes a investigar e interrogar a los detenidos señalados". El comandante Castillo Whyte ordenó al teniente Jorge Acuña que los acompañara.

Como ya era la hora de almuerzo, invitó al general Arellano al Club Social de Cauquenes. Tras el almuerzo volvieron a la oficina de la Intendencia y fue entonces cuando regresó el grupo del general Arellano. "Pedro Espinoza Bravo dio cuenta al general Arellano que cuando trasladaban a los detenidos Claudio Lavín Loyola, Pablo Vera Torres, Miguel Muñoz Flores y Manuel Plaza Arellano, en el Fundo Oriente, para ser interrogados y reconstituir la escena del lugar donde organizaban guerrillas el día 11 de septiembre, dos de los detenidos procedieron a atacar a uno de los centinelas, tratando de arrebatarle las armas e hiriéndolo en un brazo. El resto de los detenidos aprovechó de huir por los potreros". En suma, el oficial Espinoza informó al general Arellano que en cumplimiento del bando N° 24 se los había detenido y fusilado en el mismo lugar de los hechos.

— ¿Qué hizo con los cuerpos? —preguntó el juez.

—Los cuerpos de los fallecidos fueron trasladados al hospital de Cauquenes, lugar donde el doctor Mario Muñoz Ángulo practicó las autopsias. Y por orden del general Arellano, dispuse que los cuerpos fueran trasladados durante la noche desde el hospital al cementerio, misión que cumplió el teniente Jorge Acuña —contestó el comandante Castillo Whyte.

Luego, el ministro Guzmán interrogó al suboficial que fue designado por el comandante Castillo para "estar a cargo de la seguridad del general Arellano" durante su estadía en Cauquenes. El entonces sargento 2º Hugo Cárdenas Peñailillo confirmó la fecha de la masacre de Cauquenes: 4 de octubre de 1973.

Por la tarde del 4 de octubre, Lavín, Vera, Muñoz y Plaza fueron llevados al fundo El Oriente. Objetivo: matarlos. Clodomiro Garrido Vásquez, quien era detective 4º de Investigaciones, relató al juez lo sucedido: "El día en que una delegación militar retiró del recinto policial a los cuatro jóvenes cauqueninos, llegó un oficial con grado de teniente que se identificó como Fernández y que vestía ropa militar de campaña. Lo que más me impresionó de él fue el hecho de que estaba fuertemente armado, llevaba pistola, revólver, un corvo, un yatagán, entre otros. En realidad, estaba excesivamente armado. Ese mismo teniente pidió a los detenidos y se los llevó, argumentando que tenían que realizar una reconstitución de escena en el fundo El Oriente y que luego los regresarían. Mientras esperábamos su regreso, se comunicó que estos jóvenes se habían sublevado y que se les había ejecutado en el mismo lugar. La comunicación de este hecho se hizo a través de un bando militar, emitido por una radioemisora local, el mismo día de las ejecuciones".

El comisario Exequiel Jara Rodríguez, quien tenía el grado de inspector en Cauquenes, dijo al juez que "el mismo día 4 de octubre de 1973, llegó una delegación militar, alrededor de las once de la mañana, con el objeto de interrogar a Lavín, Vera, Muñoz, Plaza y a un quinto detenido, quien era sobrino del general Pinochet. Estos jóvenes estaban sindicados como activistas". Agregó que los jóvenes fueron interrogados en la oficina del jefe de la comisaría y que después los militares se fueron

Mario Baeza Ahumada, ex jefe del cuartel de Investigaciones de Cauquenes, aseguró al juez que fue el 4 de octubre cuando los cuatro jóvenes fueron sacados por personal del Ejército, el mismo día en que el general Arellano estaba en la ciudad. "Nunca supe sus nombres, además nunca los había visto en Cauquenes", dijo. Y por la tarde estaba en las oficinas de la radio local cuando el radio operador Eduardo Antúnez le avisó que "por la calle Maipú iba pasando un camión con los cadáveres de los cuatro jóvenes. Era un camión viejo de color verde".

El ministro Juan Guzmán investigó acuciosamente lo ocurrido en Cauquenes. Así, en mayo del año 1999, hizo comparecer a Marcial Salazar Hormazábal, quien fue el chofer del camión —de propiedad de Francisco Arellano—que se usó para trasladar los cuerpos. Él le contó espeluznantes detalles de lo que vio al llegar al fundo El Oriente: tuvo que prestar una olla vieja, con la que daba de comer a sus perros, para que recogieran restos de sesos de los muchachos, dispersos en el lugar al destrozarse sus cráneos. Los militares —dijo—envolvieron las cabezas y parte de los troncos con los sacos paperos que habían llevado. Entre los militares recordaba al teniente Acuña Jam y al sargento Briceño. Subieron los cuerpos al camión y "me ordenaron que los trasladara a la morgue". Él estuvo presente en las autopsias y reconoció a los muertos. "Las cabezas de los jóvenes asesinados presentaban varios impactos de bala, todos en el rostro, y toda la parte posterior de la cabeza estaba destruida, incluso faltándoles partes del cráneo". Y de la morgue siguió rumbo al cementerio, donde militares enterraron los cuerpos desnudos de los muchachos. Quedó tan choqueado —dijo el chofer Salazar—que, una vez terminada toda la macabra faena, se fue a emborrachar al casino de suboficiales en retiro de Carabineros.

 Al proceso se agregó la declaración hecha, años antes, por el médico Mario Muñoz Ángulo, director subrogante del Hospital de Cauquenes, recordando con detalle cuando —en la tarde del 4 de octubre de 1973—aparecieron los soldados, con los cuatro cadáveres en sacos "que dejaron un reguero de sangre" por el pasillo del hospital. Le dijeron que debía hacer las autopsias por orden del comandante Rubén Castillo Whyte. Las hizo, estremecido ante los cuerpos aún tibios y con las cabezas destrozadas.

Claudio Lavín Loyola, 29 años, era primo hermano de Joaquin Lavin, ex Alcalde de Santiago. Su padre era un respetado médico y regidor de la zona, quien, por su amistad con el Presidente Allende, era reconocido como el "patriarca" socialista. Por estar enfermo, el doctor Lavín no pudo acudir al llamado del comandante Castillo Whyte después del golpe militar. Fue su hijo Claudio en su lugar y cada día debió presentarse a firmar en el cuartel de Investigaciones, hasta que el 2 de octubre lo dejaron arrestado. "Me dejan detenido para tomarme declaración", explicó a su esposa. Le llevaron un saco de dormir y algo de comer. Los restos de Claudio, Pablo, Manuel y Miguel, fueron exhumados y entregados a sus familiares en octubre de 2001.

 El juez Guzmán procesó en este episodio al general (R) Sergio Arellano Stark, al coronel (R) Marcelo Moren Brito y al brigadier (R) Pedro Espinoza.

Las víctimas de Cauquenes son:

Claudio Lavín Loyola. 29 años. Casado, con dos hijos. Técnico agrícola y trabajaba en el Banco del Estado. Fue detenido el 2 de octubre por detectives, cuando se presentó a Investigaciones a cumplir con su firma diaria, trámite que le había ordenado el Jefe de Zona en Estado de Sitio, Rubén Castillo White.

 Manuel Plaza Arellano. 25 años. Técnico agrícola. Fue detenido en la madrugada del 20 de septiembre en su domicilio por una patrulla militar y enviado al Cuartel de Investigaciones de Cauquenes. 

Miguel Muñoz Flores. 21 años. Empleado de la Corporación de Reforma Agraria (CORA).  Fue detenido en su domicilio, inmediatamente después del día 11 de septiembre, por efectivos de Investigaciones y trasladado al Cuartel de esa Institución. 

Pablo Vera Torres. 22 años. Estudiante y empleado, dirigente de la Juventud Socialista de la zona, quien había sido detenido y dejado en libertad; detenido nuevamente el mismo mes, fue conducido al Cuartel de Investigaciones. 


Condenan a cuatro ex militares por sus responsabilidades en caso Caravana de la Muerte en Cauquenes

Fuente :cauquenesnet.cl, 16 de Abril 2020

Categoría : Prensa

La Corte de Apelaciones de Santiago condenó a cuatro miembros del Ejército en retiro por su responsabilidad en los delitos de homicidio calificado de Claudio Arturo Lavín Loyola, Miguel Enrique Muñoz Flores, Manuel Benito Plaza Arellano y Pablo Renán Vera Torres. Ilícitos perpetrados el 4 de octubre de 1973, en el marco de la denominada Caravana de la Muerte, en su paso por la ciudad de Cauquenes.

En fallo unánime (causa rol 56-2017), la Tercera Sala del tribunal de alzada –integrada por los ministros Carlos Gajardo, Alejandro Madrid y la abogada (i) Paola Herrera– confirmó la resolución impugnada, en la parte que condenó a Pedro Antonio Espinoza Bravo, en calidad de autor de los delitos, con declaración que la pena única que se impone se rebaja a 20 años y un día de presidio mayor en su grado máximo. En tanto, Jorge Godofredo Acuña Hahn deberá purgar 3 años y un día de presidio, en calidad de cómplice de los cuatro homicidios calificados.

Asimismo, el fallo revocó la sentencia de primer grado que absolvió a Juan Viterbo Chiminelli Fullerton, declarando que se le condena a sufrir la pena de 10 años y un día de presidio, como coautor de los delitos de homicidio calificado de Lavín Loyola, Muñoz Flores, Plaza Arellano y Vera Torres. De igual forma, se condenó a Emilio Robert de la Mahotiere González a la pena de 5 años de presidio, como encubridor de los delitos.

Finalmente, se decretó la absolución de Enrique Anaximen Rebolledo Jara de la acusación que de oficio se formuló, en calidad de cómplice de los cuatro homicidios calificados; y se aprobaron los sobreseimientos definitivos de Rubén Castillo Whyte, por enajenación mental; y de Sergio Carlos Arredondo González, Carlos Leonardo López Tapia y Antonio Palomo Contreras, por fallecimiento.

Decisión acordada, en la parte que confirma la decisión civil, con el voto en contra del ministro Madrid, quien fue de parecer de revocar el fallo de primer grado en este aspecto, y acceder a la indemnización de perjuicios solicitadas por los demandantes.

En la etapa de investigación de la causa, a cargo de la ministra en visita extraordinaria Patricia González Quiroz, se establecieron los siguientes hechos: Que el 4 de octubre de 1973, “aterrizó en Cauquenes, en el Regimiento Andalién, un helicóptero ‘Puma’, con un grupo de militares bajo el mando del entonces General de Ejército, Sergio Víctor Arellano Stark, delegado por quien era Comandante en Jefe del Ejército, Augusto Pinochet Ugarte, con el objeto de cumplir labores de coordinación de criterios institucionales de gobierno interior y procedimientos judiciales o de revisar y acelerar procesos en curso”.

“Ese mismo día, algunos miembros de la comitiva sustrajeron sin facultades ni derecho al efecto -ya que carecían de orden o documento que lo habilitara para ello-, desde el Cuartel de Investigaciones de esa ciudad a Miguel Enrique Muñoz Flores, Manuel Benito Plaza Arellano, Pablo Renán Vera Torres y Claudio Arturo Lavín Loyola, trasladándolos hasta el predio ‘El Oriente’ de dicha localidad, donde les dieron muerte con armas de fuego”, añade.