Romero Muñoz Roberto del Carmen


AFDD.CL

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Rut : 6.173.703-0

Fecha Detención : 09-10-1973
Lugar Detención : Parral


Fecha Nacimiento : 25-03-1950 Edad : 23

Lugar Nacimiento : Ranquil

Actividad Política :
Actividad : Obrero agrícola

Estado Civil e Hijos : Soltero
Nacionalidad : chilena


Relatos de Los Hechos

Fuente :informe corporación

Categoría : Antecedentes del Caso

Rut       : 51.477 Parral

F.Nacim. : 25-03-50, 23 años a la fecha de su detención

Domicilio : San Martín 1085 Parral

E.Civil  : Soltero

Actividad : Obrero

C.Repres. : Sin información

F.Detenc. : 9 de octubre de 1973

 

    SITUACION REPRESIVA

            Roberto del Carmen Romero Muñoz, de 23 años al momento de los hechos, soltero, obrero agrícola, fue detenido el día 9 de octubre de 1973 siendo aproximadamente las 15:30 horas, cuando concurrió voluntariamente a la Comisaría de Parral.

            Posteriormente, transcurridas algunas horas, fue trasladado a la Cárcel de la misma ciudad. Aproximadamente el 23 de octubre, su familia fue informada que éste había quedado en libertad. Sus familiares lo vieron por última vez el día de su arresto, a partir de esa fecha permanece detenido desaparecido.

            María Bustos, esposa de uno de los carabineros de la Comisaría de Parral, avisó a Romero Muñoz que debía presentarse en el recinto policial a lo cual él accedió. Su hermana Flora del Rosario Romero Muñoz, que tenía domicilio en Santiago -al ser informaba del arresto de éste- se trasladó hasta la pequeña localidad y comenzó diariamente a llevarle alimentos y ropa hasta la Cárcel, lugar en el cual permanecía recluido.

            No pudo verlo en ninguna oportunidad pero sí pudo hacerle llegar sin inconvenientes encomiendas que eran recibidas en la guardia del recinto. Sorpresivamente al concurrir el día 23 de octubre -como lo hacía habitualmente- fue informada que éste había sido puesto en libertad a las 21:00 horas del día anterior.

            Marcelino Antonio Escanilla Escobar que fuera detenido el día 14 de septiembre de 1973, por un Sargento de Carabineros de apellido Díaz, informó a la familia de Romero Muñoz haber visto la llegada de éste a la Cárcel de Parral los primeros días de octubre de 1973.

            Por su parte Julia Escobar, madre de Marcelino Antonio Escanilla Escobar fue testigo el día 22 de octubre del momento en que su hijo Claudio Escanilla Escobar, Roberto del Carmen Romero Muñoz, Aurelio Peñailillo Sepúlveda, José Bustos Fuentes, Manuel Bascuñán Aravena, Rafael Díaz Meza, Ireneo Méndez Hernández y Oscar Abdón Retamal Pérez, fueron sacados de la Cárcel en un vehículo de Investigaciones de color rojo, a cargo del Sargento de Carabineros Luis Alberto Hidalgo. Transcurridos 7 días de los hechos recién señalados, otro detenido Marcelino A. Escanilla Escobar recuperó su libertad, en tanto que los otros 7 detenidos -entre estos su hermano Claudio- permanecen en calidad de detenidos desaparecidos.

            También fueron testigos de la permanencia de estas 7 personas en la Cárcel de Parral, Nelson Guillermo León Alarcón y otra persona de apellido González, las cuales también permanecieron recluidas en el recinto de la Cárcel de Parral recuperando sus libertades en fechas posteriores a octubre de 1973.

            En el caso de Roberto del Carmen Romero Muñoz la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación logró reunir información complementaria que permite esclarecer en parte las circunstancias de su desaparecimiento. Tanto Romero Muñoz como las otras 6 víctimas registran salida de la Cárcel Pública de Parral el día 23 de octubre de 1973, desde donde fueron llevados por una patrulla de Carabineros para declarar en la Fiscalía Militar, por orden del Gobernador Departamental de Parral -según lo acreditó por diversos medios la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación-. Al revisar la Comisión el libro de novedades de la Cárcel Pública, pudo constatar que en él quedó constancia que el 23 de octubre "por orden del señor Gobernador Departamental …se pone en libertad a los siguientes detenidos; José Bustos Fuentes, Claudio Escanilla Escobar, Rafael Díaz Meza, Ireneo Méndez Hernández, Manuel Bascuñán Aravena, Roberto Romero Muñoz y Oscar Abdón Retamal Pérez…".

 

           GESTIONES JUDICIALES Y/O ADMINISTRATIVAS

            Los antecedentes más arriba señalados, fueron puestos en conocimiento del Juzgado de Letras de Parral en febrero de 1991 a fin de dar inicio a la investigación judicial correspondiente, dado que los documentos obtenidos por dicha Comisión relativos a la "libertad de estas personas" se presentan contradictorios con informes procesales anteriores.

            Es del caso señalar que los antecedentes procesales previos a que hace referencia la Comisión Verdad y Reconciliación no fueron conocidos por esta redacción por ser parte del sumario.

           


EL ORGULLO DE SER PARRALINO.(libro)

Fuente :ruil.cl 30/08/2021

Categoría : Prensa

Al Callín lo mandaron a comprar levadura y nunca más volvió. Su madre lo esperó en la puerta hasta que murió. Ella decía: «¿Pero cómo?, si fue a comprar no más, ¿cómo se va a demorar tanto», y se sentaba en el portal de su puerta a esperarlo.

El Callín siempre fue un niño inquieto, le gustaba andar con los más grandes. Se juntaban en la plaza de la esquina, hacían rayados a favor de Allende, o tiraba panfletos. A sus dieciséis años creía en la revolución. Su familia, ocho o nueve hermanos, hijos de campesinos, nunca se metieron en política, pero el Callín sí. Trabajaba lustrando zapatos en la plaza de Armas de Parral, donde todavía se pueden ver los puestos de lustrabotas, aunque todos ellos desaparecieron.

Claudio Jesús Escanilla Escobar era su nombre, pero todos en Parral le llamaban El Callín. El 13 de septiembre fue detenido por una patrulla militar. Iba junto a Nelson León y a Emiliano Mena, pero a ellos lo dejarían libre días después. A la señora Julia, su madre, los lustrines de la plaza le contaron que los militares y el sargento de carabineros Luis Hidalgo lo habían detenido, y que, al parecer, estaba preso en la Comisaría de Parral. Y efectivamente, el 14 de septiembre lo trasladaron a la cárcel, donde la señora Julia sólo pudo dejarle ropa y comida ya que nunca le permitieron verlo.

Junto al Callín fueron detenidos treinta y tres personas más, la mayoría de ellos jóvenes que no pasaban los veintidós años. Hijos de obreros, campesinos, gente pobre que, por una u otra razón, fueron detenidos, llevados a la Comisaría de Parral y que luego nunca más se supo de ellos. Ya desde esa época rondaba la idea que los habían llevados a la Colonia Dignidad, el enclave alemán que operó con total impunidad durante décadas en Chile y dirigida por el ex miembro de las juventudes hitlerianas Paul Shäffer.

El primero en ser detenido fue Luis Evangelista Aguayo Fernández, de veinte años; le siguió Hugo Enrique Soto Campos, de dieciocho años y estudiante secundario. También fue detenido Aurelio Clodomiro Peñailillo Sepúlveda, de treinta y dos años, y jubilado por invalidez. También Oscar Eladio Saldías Daza, de veinte años, proveniente de una familia de escasos recursos, quien trabajaba para cuidar a su madre y una sobrina de cinco años que estaban criando. También Enrique Ángel Carreño González, el único estudiante universitario, quien fue dejado  en libertad y luego arrestado para no saberse nunca más de él. También José Ignacio Bustos Fuentes, de cincuenta y dos años, un campesino que vivía con su madre, quien recorrió los cuarteles militares de Linares y Talca, pero nunca nadie más lo vio. También Rafael Alonso Díaz Meza, de veintitrés años; Irineo Alberto Méndez Hernández, de veintidós; Manuel Eduardo Bascuñán Aravena, de veintitrés; Óscar Abdón Retamal Pérez, de diecinueve y estudiante; Roberto del Carmen Romero Muñoz, de veintitrés años y obrero agrícola.

En octubre desaparecieron las siguientes personas: Armando Edelmiro Morales Morales, de diecinueve años y estudiante secundario. Luis Enrique Rivera Cofré, de veintiún años, padre del niño de nueve meses Vladimir Rivera Órdenes y de un hijo en camino que también llamarían Luis.  También desaparecieron Víctor Julio Vivanco Vásquez, de diecinueve años; y José Hernán Riveros Chávez de veintitrés. En Catillo, comunidad cerca de Parral, fueron detenidos Miguel Rojas Rojas y Gilberto Rojas Vásquez, padre e hijo. También Ruperto Oriol Torres Aravena, de cincuenta y ocho años, campesino y padre de tres hijos que quedaron huérfanos. También Ramiro Romero González, de veintiocho años, campesino, casado, dos hijos. Y Alfredo Durán Durán, de cuarenta y ocho años, quien trabajaba en el Registro Civil.

Los últimos casos de detenidos desaparecidos en Parral corresponden a 1974, más una mujer asesinada, Bella Aurora Sepúlveda Valenzuela. Se trató de doce hombres, ocho de los cuales estaban ligados a un singular hecho represivo conocido como el caso de «El Águila». Entre ellos, Aroldo Vivían Laurie Luengo y Hernán Sarmiento Sabater.

Los últimos detenidos fueron José Luis Morales Ruiz de veintiún años, artesano, quien tenía dos hijos, y Juan Francisco Ponce González, de quien no se tiene ningún registro y ni siquiera aparece en el Informe Rettig.

En la mayoría de los detenidos, salvo los involucrados en el caso de «El Águila», aparece el nombre de Luis Hidalgo, un amable señor que hasta el día de su muerte, se paseaba por el centro de Parral con total impunidad. Nunca nadie lo enfrentó, por miedo claro está. No fue condenado, no pisó la cárcel, no se arrepintió y lo más probable es que para muchos sea una de las figuras más destacadas de Parral.

Cuando le pregunté a la señora Julia que por qué salía todos los días a sentarse fuera de su casa, me respondió: «Por si aparece el Callín, sepa que esta es su casa». Nunca nadie pudo levantarla de ahí hasta que murió, esperando al hijo que ese fatídico día salió a comprar levadura.

Libro: En el pueblo hay una casa pequeña y oscura.
Autor: Vladimir Rivera Órdenes (Parral, 1973) es guionista, narrador y profesor.
Cronica: El orgullo de ser parralino.